
Ayer estaba viendo Pretty Woman o Mujer Bonita una peli lindísima. En la película Edward (el protagonista) tiene una vida de lujos, todo lo que desea lo puede conseguir, hasta escoge el penthouse del hotel, aunque tenga miedo a las alturas solo por ser la mejor habitación. El hombre que algunas mujeres quieren tener, con un buen trabajo, carro, casa y todo el dinero disponible.
Aunque Edward tiene todo no es feliz, él piensa que le falta algo pero no sabe que es, huye de una fiesta y encuentra a Vivian una prostituta de camino.
Acá no contaré la historia por eso sino no has visto la peli te la recomiendo, quiero que veamos a ese hombre, al personaje de Edward.
Si te fijas él es un hombre encerrado en la rutina diaria de su trabajo y es solo cuando conoce a Vivian que va descubriendo quién es realmente. Esta es la imagen de muchos hombres que haciendo lo que “deberían” hacer, pierden el sentido de su vida y deciden tirar todo, dejar hijos, un matrimonio o simplemente seguir su vida sin más ni más por dentro destruidos pero mostrando lo mejor al exterior.
El libro Salvaje de Corazón, que hace unas semanas recomendé y que estoy leyendo ahora comenta:
«La aventura, con todos sus requisitos de peligro y locura, es un profundo anhelo espiritual en el alma del hombre. El corazón masculino necesita un lugar donde nada sea prefabricado, modular, sin grasa, veloz, adjudicado, conectado, calentado en microondas. Donde no haya fechas límites, teléfonos celulares ni reuniones de comité. Donde haya espacio para el alma, donde finalmente, la geografía que nos rodea corresponda a la de nuestro corazón.”
Muchas veces hacemos todo lo contrario a lo que él quiere ser, lo llevamos por otro camino para domesticar a “nuestro hombre” que este bien aseado, que cumpla el horario, que llegue temprano a casa, que deje de salir con los amigos, que no haga cosas locas, que olvide los juegos peligrosos, que saque la basura y se acueste temprano…
Pero en realidad no estamos entendiendo la naturaleza de la masculinidad.
Si te das cuenta los deseos, gustos y aspiraciones entre hombre y mujer es totalmente diferente. Hoy en día creo que necesitamos dejar ser y no reprimir tratando de adecuarlo a la vida que un hombre perfecto debe llevar.
En el libro habla de algo que tiene mucho sentido para mí, los hombres buscan tres cosas importantes en su vida:
Un Aventura que vivir
“La aventura requiere algo de nosotros, algo que nos pone a prueba. Aunque quizás temamos la prueba, al mismo tiempo ansiamos ser probados, para descubrir que tenemos lo que se requiere.”
Si te das cuenta son hombres los que buscan aventurarse a lo desconocido. Hacer algo que les implique riesgo, aventura. Piensa cuando él te dice que hagan algo loco o que quiere salir con sus amigos a jugar o tantas cosas que se le pueden ocurrir hacer, hasta puede que no te las comente porque piense que es muy descabellado y que tiene que ser un hombre más “civilizado” o acomodado a la vida que quieren tener.
Una Bella que rescatar
“Un hombre desea ser el héroe de una mujer bella. Los jóvenes van a la guerra portando una fotografía de su amada en la billetera. ¿Qué sería Robin Hood o el rey Arturo sin las mujeres que amaban? Hombres solitarios pelean batallas solitarias. Indiana Jones y James Bond no serian los mismos sin una belleza a su lado e inevitablemente deben pelear por ella.”
Lo vemos hasta en Adan y Eva. Dios le dio todo Adan pero le faltaba algo, su Eva. Porque crees que los chicos van a buscar esa lagartija que te asusto o te llevan como su princesa, en su interior desean encontrar a una bella a quien rescatar.
Una Batalla que pelear
“Capas, espadas, camuflaje, pañuelos de colores y pistolas de seis tiros… estos son los uniformes de la infancia. Los niños pequeños ansían saber que son poderosos, que son peligrosos, que son alguien con quién vérselas. ¿Cuántos padres han intentado en vano evitar que sus pequeños jueguen con armas? Dese por vencido.”
Pensaba en el hecho de que todas las películas, juegos, series animadas que los chicos les gusta ver, son sobre peleas y guerras. Por supuesto como dice en el libro no se quedan atrás todos los juegos que de pequeños eran sus grandes batallas.
Entendamos la masculinidad de ese hombre a nuestro lado. Sé un apoyo para su vida, no quiero decir que se vaya al campo a cazar un animal, sino que pueda ser él quien tenga la libertad de poder vivir esa aventura y pelear esa batalla.
¿Cómo lo ponemos en práctica? … continuará