Me encanta el mes de diciembre por las decoraciones en la ciudad, la música de navidad, la comida que en esa fecha especialmente se prepara, las reuniones en familia y lo más importante recordar el nacimiento de Jesús.
Siempre se me pasa rápido. Comienzo el mes con ganas de hacer de todo y luego me doy cuenta que ya es 31. Sé que luego inicia el nuevo año y le acompañan los retos y metas que quiero cumplir. Primero hago un recuento mental de lo que sucedió el año que pasó. Algo que me ayuda es leer los agradecimientos en nuestra caja en casa (anotamos mensualmente o cada vez que nos pasa algo por lo cual estamos agradecidos). Y luego, escribo mis metas anuales.
Tengo en cuenta lo que quiero lograr. Que cada meta sea alcanzable, es decir, lo más realista posible en cuanto a mi capacidad de energía, tiempo y dinero dedicados. Esto me ayuda a evitar frustrarme por haber dejado incompleta alguna de las metas.
También algo que considero, es evaluar lo que espero lograr en un largo plazo. Un tiempo adecuado para mi es de tres a cinco años hacia adelante, porque así tengo una perspectiva e idea clara de que quiero hacer este año. Puede ser que aquí compartas con tu esposo metas en común y juntos se ayuden alcanzarlas.
Tres metas que quiero lograr este 2016 son:
- Ser mejor esposa, madre y mujer en todo lo que haga
- Dar más de mi sin esperar nada a cambio
- Esforzarme por ser coherente con lo que creo y vivo
Algo que debo tener en cuenta es que estas metas se logran UN DÍA A LA VEZ, tengo cada día para ser lo que quiero ser, para amar, ser paciente, para considerar al otro, para ser feliz y disfrutar el día siendo agradecida por lo vivido. Cada día requiere tiempo y cada día es un paso logrado.
A esto te invito: A planear tus metas y lograrlas un día a la vez.