Desde hace unas semanas asisto a un grupo de lectura; la idea es leer un capítulo semanal y reunirnos a conversar sobre lo leído. Escuchar las opiniones de las demás y las diferentes formas de pensar de cada una de las mujeres que comparten este espacio, me encanta.
Hoy recordando que hace unos días murió Billy Graham (un personaje bastante importante en la historia del cristianismo en los Estados Unidos), tuvimos un tiempo de reflexión sobre las personas que han impactado a la humanidad, de tal forma que son recordadas con admiración. Una señora mayor tal vez de unos 65 años, contó como había asistido a una de las cruzadas (presentación en vivo) de Billy Graham.
Empezó su historia diciendo que en ese tiempo en el que ella tenia unos trece años, su madre al ver que no podía contener a su hija rebelde -mientras que tenía a otros cinco hijos que atender- la dejo con su tía, quien vivía sola sin haberse casado y sin hijos. Esta tía la lleva a ver a este predicador.
La historia me dejo impactada, por el hecho de que ella tuviera un pasado como ese, nunca lo hubiere imaginado. Me acerque y le dije lo interesada que estaba por conocer más de su historia.
Me contó sobre un día patinando con su tía, llego un caballero (esta historia paso mas o menos en el año 1962) a pedir que le presentara a su «hermana», ella le presentó a su tía y después de un año se casaron. En la recepción de la boda ella gana el ramo, para ese entonces era una niña de quince años, y su madre en medio de la celebración le gritó: ¡suelta ese ramo! y exactamente un año después de esto se casaba a sus diescíseis años. Este año celebra 55 años de casada.
Para mí la historia de Toni me muestra como las decisiones y situaciones de nuestra vida nos van llevando por caminos diferentes a los que pensabamos, y en este caso la decisión de su madre de dejarla con su tía hizo de ella la mujer que es hoy.
Creo que es interesante poder ver los detalles de nuestra historia o nuestra vida que pueden ser ilustraciones y ejemplos valiosos para otras personas y que para nosotros pasan desapercibido.